Seguro que te has dado cuenta que desde que estamos más en casa, hay días que no tienes ganas de nada. Empezaste el confinamiento con muchas ganas de aprender nuevas recetas, ver las series de Netflix que tenías en tu lista, hacer algún curso online… Y ahora viene la pregunta ¿cuántas has hecho?
La inmensa mayoría de la gente, de una lista de 10 tareas, acaba haciendo una o dos y casi siempre a medias.
¿Por qué nos pasa eso? ¿Por qué hay días que somos súper productivas y otros días no tenemos ganas de hacer nada? Es algo común en prácticamente todo el mundo, pero no por ello debemos dejarnos ir por la apatía y dejar pasar los días sin hacer nada. Reconozco que algún día apático de vez en cuando viene genial, pero muchos… aburren.
Te voy a dar 4 consejos de qué hacer si te encuentras con uno de esos días «raros». Estos consejos ayudarán a devolverte la energía y la productividad.
Vamos a ello:
- Ordenar.
Como es algo que no necesitas estar al 100 % concentrada, es una actividad perfecta. Cuando estamos agobiadas, no hay cosa que ayude más que ordenar. Mentalmente ayuda a desenredar asuntos, poner claridad cuando no ves solución. Mueve energías y eso favorece a tu estado de ánimo.
Con ordenar no me refiero a ordenar una habitación, que también. Seguro que tienes en tu móvil un montón de fotos, de Navidades, algún cumpleaños, ¿cuándo te pondrás a ordenar, borrar las que no quieres y guardar las que sí? ¡Eso también es ordenar! - Tiempo para ti.
Quizás esa apatía significa «necesito tiempo para mí». Pues dedícate todo lo que puedas a mimarte, consiéntete durante un día. Las mamis, normalmente no tenemos un día entero para nosotras (¡¿eso existe?!), lo sé, así que un par de horas pueden recargarte las pilas. Ponte guapa, pero para ti. Siéntete espléndida, ese vestido que tanto te gusta, rescátalo del armario.
Puedes darte un baño, ver una peli, varios capítulos de tu serie favorita, salir a pasear… ¡Lo que sea que te guste! Y disfrútalo, no pienses en qué hacer luego, sólo vive el momento presente, agradécelo. - Haz algo creativo.
No pienses que no eres creativa, no sólo pintar es serlo. Se puede cocinar, escribir lettering, hacer scrapbooking… Si no sabes de qué te hablo, ponte a buscar y verás como se apetece empezar por alguna de estas manualidades. - Planificar.
Me encantan las listas, gracias a ellas ordeno mis ideas para escribir posts, incluso para realizar mis cursos. Despeja la mente, te lo aseguro. Pero, ¿listas de qué? Pues desde la lista de la compra (es ideal hacerla un día que estés apática, porque normalmente no encontramos tiempo para hacerla, vamos al súper sin ella y… desastre, tú y yo sabemos qué pasa).
También puede ser escribir tu Plan de Vida, algo súper importante de lo que ya os he hablado por aquí. Sea lo que sea que quieras planificar, se va a ahorrar mucho tiempo en un futuro y verás como, al planificarlo, terminas haciendo lo que habías planificado. Es de las mejores herramientas para acabar con la apatía.
Y tú, ¿tienes algún truco para esos días? Déjame un comentario.
Mireia Esteve Coach 